Una de las razones mas comentadas es lo que tiene que ver con la tradicion del Ohaguro, una de las practicas de las mujeres japonesas que consitia en pintar los dientes, el producto del tinte era una mezcla de óxido ferroso, té y sake que conseguía un color negro puro en los dientes.
La razón por la que se pintaban los dientes era por que el blanco de la propia dentadura no se consideraba bello; de modo que recurrieron a un color totalmente opuesto que terminó siendo todo un símbolo de belleza.
Este tipo de tradición se empezó a practicar desde el periodo Nara (Nara-jidai), que va desde el año 710 al 784; concretamente cuando la emperatriz japonesa Genmei establece la capital de Japón en el palacio Heijo-kyo de la ciudad de Nara.
Era un símbolo de la alta nobleza japonesa y las mujeres se teñían los dientes constantemente, pues lucir este tipo de mezcla se creía algo “bonito”. Las mujeres de la época llegaron a llevar este tinte en sus dientes alrededor de 200 años.
Para el periodo Edo (Edo-jidai) que va desde el año 1603 al 1867, conocido por como el periodo de los Shogunes, el ohaguro empezó a tomar como significado la madurez, indicaba que dicha mujer ya contrajo matrimonio. El ohaguro comienza a desaparecer sobre el año 1870, cuando autores de libros publican que la emperatriz dio la cara con los dientes blancos.
Sin embargo curiosamente la gran mayoría de las mujeres japonesas se tapan la boca cuando ríen, se dice ahora que con el paso del tiempo las mujeres que usaban el tinte negro en los dientes se comenzaron a avergonzar de ello, pero esta costumbre de tapar la boca se ha conservado por varias generaciones, y es curioso que lo sigan haciendo.
Fuente: RumboaJapón.es